Caminando por las tierras del marqués
Este domingo, ruta senderista para conocer los principales pazos carballeses
"Recorreremos "Las tierras del marqués", una ruta de senderismo de 14 kilómetros que pasará por tres de los principales pazos carballeses: el de Gontade, el más antiguo; el de Vilar de Francos, el más conocido, y el de As Pallas"
Y seguimos caminando y conociendo los más hermosos rincones del ayuntamiento de Carballo con Senda Nova. Este domingo recorreremos "Las tierras del marqués", una ruta de senderismo de 14 kilómetros que, desde Ardaña hasta Artes, pasará por tres de los principales pazos carballeses: el de Gontade, el más antiguo; el de Vilar de Francos, el más conocido, y el de As Pallas, del siglo XVII. Además, subiremos al alto de A Peniqueira, punto de confluencia entre Rus, Ardaña y Artes, y allí visitaremos una mámoa y un castro que nos harán recuperar la memoria del megalítico y de la edad de hierro carballesa.
Gontade: el más antiguo de los pazos carballeses
Reloj de sol del Pazo de Gontade
La ruta comienza en Ardaña, donde haremos la primera parada de interés, el Pazo de Gontade.
Son las de esta parroquia tierras fértiles que, en el pasado, pertenecían en gran parte a la familia de este pazo que nació del vínculo (sujección de los bienes con prohibición de enajenarlos) fundado en 1596 por el matrimonio formado por Rodrigo de Breixo y Catalina Rodríguez.
El pazo es hoy en día una casa de labranza, pero tanto su porte como el escudo de su fachada delatan su origen noble.
Detente en el portal de la entrada, porque allí podrás ver un curioso reloj de sol grabado en la piedra.
El alto de A Peniqueira
Pasaremos después por la iglesia de Santa María de Ardaña, de la que llama la atención su esbelto campanario de color blanco. Erguido a mediados del siglo XX en una sola pieza de hormigón, resalta sobre el resto de templo, de piedra y con características barrocas.
Tras este alto en el camino, iremos subiendo por caminos entre los montes de Ardaña y Artes hasta llegar al alto de A Peniqueira, donde visitaremos un castro y una mámoa.
Marcando los límites entre las parroquias de Rus, Ardaña y Artes, hay una piedra con una letra V dibujada. Se dice que simboliza a la familia Vilar de francos, y que la V está orientado hacia las tierras del marqués de Vilar de Francos, en Artes.
El pazo y el roble de Vilar de Francos
Pazo de Vilar de Francos
El Pazo de Vilar de Francos llama la atención por sus dimensiones y por lo bien conservado que está, lo que se debe, entre otros motivos, al hecho de que hubiese estado habitado por el marqués hasta épocas bien recientes, pues en él residió hasta los años noventa. Gente de la zona aún lo recuerda repartiendo manzanas de su huerta en un viejo coche, lo que da idea de la decadencia del poder nobiliar.
El pazo tiene sus orígenes en el siglo XVI, en tiempos de Carlos V. De esa época es, de hecho, la torre central, de cuatro pisos.
Cerca del pazo encontraremos otro monumento, pero en este caso, natural: el "carballo" (roble) de Vilar de Francos. No sabemos cuantos años tiene, pero con seguridad, son cientos.
Para abrazarlo, hacen falta varias personas, y sus ramas le dan sombra a la mayor parte de la finca en la que está enclavado. Es uno de los pocos árboles, en Galicia, incluido en el "Catálogo galego de árbores senlleiras" (catálogo gallego de árboles singulares).
El Pazo de As Pallas
Pazo de As Pallas
Termina la ruta junto al Pazo de As Pallas, donde podremos recrearnos con las vistas del valle que lo rodea. Este pazo, fundamentalmente barroco, fue fundado en el año 1600 por la familia Pardiñas Villardefrancos y Becerra. En su escudo podemos ver las insignias de las familias Bermúdez (un ajedrez), Castro (seis círculos), Vilardefrancos (brazo armado con estandarte) y Pardiñas (castillo con torre de homenaje y rodeado de zarzas).
Será, esta ruta de Senda Nova, no sólo un recorrido por nuestros paisajes interiores, por esos fértiles valles sobre los que antaño dominaban los señores de los pazos, sino también por nuestra historia, por aquellos tiempos en los que el sudor de las y de los labradores iba a mayor gloria de aquellas familias nobles que poseían los terrenos que la gente del campo tenía que trabajar.
*Fotos de Senda Nova